
Un mouse cableado todavía conserva varias ventajas que lo hacen una opción sólida, especialmente para quienes buscan rendimiento, consistencia y menor inversión.
Estas ventajas hacen que un mouse con cable sea la opción lógica para quienes usan la computadora para trabajo, gaming competitivo o simplemente buscan buena funcionalidad sin complicaciones.
Por otro lado, los mouse inalámbricos han evolucionado muchísimo y hoy ofrecen una libertad de uso que antes era impensable.
Si tu uso es más general, para oficina, estudio, navegación, o incluso gaming casual donde la movilidad y comodidad pesan más que milisegundos de ventaja, el mouse inalámbrico tiene mucho sentido.
La respuesta es: depende de tu perfil de uso, presupuesto y prioridades. Para ayudarte a decidir, revisemos algunos escenarios:

